Shine On, You Crazy Diamond - Syd Barrett - 1946-2006.

Remember when you were young, you shone like the sun.
Shine on you crazy diamond.
Now theres a look in your eyes, like black holes in the sky.
Shine on you crazy diamond.
You were caught on the crossfire of childhood and stardom, blown on the
Steel breeze.
Come on you target for faraway laughter, come on you stranger, you legend,
You martyr, and shine!

(Shine On You Crazy Diamond. Letra de Roger Waters, para Syd Barrett)

Debe ser sólo una mera coincidencia que esté lloviendo sobre la capital. Total, es invierno, y es normal y esperado que eso suceda. El ambiente se tiñe de melancolía y de una leve tristeza. Algo normal en estos días. Sin embargo, la pena recorre el sentir de muchos a los que nos gusta la música hoy. Syd Barrett, el legendario fundador de Pink Floyd, falleció a los 60 años, producto de complicaciones de diabetes.

No saco nada con reeditar algo que de seguro todos han tenido la oportunidad de leer en las agencias, sitios de noticias, diarios y soportes escritos de todo el mundo, además de los boletines de radio y TV. A la hora de almuerzo mi mamá me llama para que vaya a ver lo que estaban pasando en las noticias: imágenes de archivo (casi todas fotos) de Syd Barrett en sus días de militancia en Pink Floyd, cuando parecía que había un futuro esplendor con ellos. Pero bien sabemos que los diamantes locos pasan como estrellas fugaces, y que la mente no aguanta tanta intensidad inducida. Pareciera que su futuro estaba escrito tras perder la razón y no volver de ese viaje.

Por todo lo anterior, lo siguiente lo reproduciré de donde, de seguro, todos lo han leído. Según lo comunicado por las agencias en todo el mundo, esto es lo que ocurrió:


"Syd Barrett, líder original y miembro fundador de Pink Floyd, falleció el pasado viernes 7 de julio en su hogar de Cambridgeshire, Inglaterra, por complicaciones debido a la diabetes que sufría desde hace años. Tenía 60 años de edad.

Según informa el periódico inglés The Guardian, su hermano Alan informó a la prensa que Syd murió "de manera tranquila" en su casa, y que en los próximos días se realizará un funeral íntimo para sus familiares.

El verdadero nombre del músico era Roger Keith Barrett, y había nacido en la región de Cambridge en 1946. Tras complicaciones debido a su adicción al LSD, Barrett dejó Pink Floyd en 1968, y publicó dos discos como solista: The Madcap Laughs y Barrett, asistido por sus ex compañeros y miembros de Soft Machine, entre otros. Posteriormente, el músico se recluyó en el sótano de su casa natal, y una leyenda creció tras eso.

En 1975, Pink Floyd publicó su disco Wish You Were Here, en donde incluyeron la suite "Shine on You Crazy Diamond", homenaje de sus ex compañeros a la figura de Barrett".


A pesar de que Barrett era poco menos que un "muerto en vida", no deja de soprender la noticia de su fallecimiento. En lo poco que grabó y realizó en la música durante su vida, Barrett logró trascender de una manera en que millones de almas dedicadas a lo mismo jamás lo han logrado y ni siquiera lo van a lograr.

Lo que hizo Syd Barrett en vida (y mientras sus condiciones se lo permitieron) fue mostrarnos nuevos pasajes de percepción y apreciación. The Piper At The Gates Of Dawn es un indispensable para comprender la apertura del lenguaje musical. Es ahí donde la vanguardia se abre paso y penetra en el oído popular de forma única. Y fue Barrett el que lo logró con éxito.


Sin embargo, no debemos olvidar esos increíbles discos solistas que sacó, The Madcap Laughs y Barrett. Si nos ponemos a buscar, encontraremos bastante material de su trabajo solista, gracias a las cajas y compilados, aparte de las reediciones, las que incluyen tomas alternativas. Si las escuchamos atentamente, no se tratan de descartes desechables, sino que de relecturas interesantes y reencantadoras. En ese par de empresas en solitario lo ayudaron los Pink Floyd. David Gilmour fue productor, y también colaboraron Roger Waters y Rick Wright. Resulta curioso que, a pesar del distanciamiento, Syd seguía estando presente en sus vidas.

Uno de los últimos recuerdos visuales que se tenía de Barrett era un par de fotos que le tomaron cuando fue a visitar a los Pink Floyd cuando estaban grabando la suite Shine On You Crazy Diamond, la canción dedicada a él, incluida en ese disco con la presencia fantasmal de Barrett llamado Wish You Were Here. El evidente sobrepeso y cejas depiladas era lo que lucía el perdido Syd de entonces. También hay algunos registros de un viejo Barrett, infructuosamente contactado por la prensa en los mismos días en que sus ex compañeros preparaban su regreso de 20 minutos en el Live 8. Todo fugaz; todo de paso.

Si aún no se han acercado a la obra del “late great” Syd Barret, les recomiendo ese increíble compilado llamado The Best Of Syd Barrett - Wouldn´ You Miss Me?, que contiene una increíble canción perdida llamada Bob Dylan´s Blues, obviamente dedicada al troesma. Nunca es tarde para escucharlo y apreciarlo como se merece.

Pink Floyd - Astronomy Domine

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Syd Barrett - Love Song

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