lunes, noviembre 13, 2006

Sobre Fother Muckers en Copequén, el disco y fotos personales.


Reconozco que, desde hace un tiempo, este espacio de simulcast que hago en este blog con el fotolog, se ha tornado cada vez más personal. En un comienzo, la cosa no era así. Recién en la foto número 100 (entiéndase esto cn las fotos/textos del fotolog) subí una imagen de la realidad, una foto de este humilde servidor. Y la justificación no era otra más que la de celebrar la centena de escritos de cinco mil caracteres.

Sin embargo, mi propia regla tácita de evitar la auto referencia se ha ido resquebrajando. Y no es porque los temas a comentar se vayan acabando (siempre los hay, en esta extraña cabeza que tiene wena memoria para muchas cosas, una función bastante freak mía), pero en estos últimos meses las cosas han ido cambiando mucho. Y la foto que subo ahora da cuenta de ello.

Esa foto creo que la tomó Ignacia, la novia de Simón, bajista de Fother Muckers, cuando tocamos hace un par de semanas en el Clandestino de Guardia Vieja con Providencia. Creo que ya me referí a ese gran show que dimos, con diez canciones separadas en lado A y lado B, para el disfrute de la audiencia, que prácticamente colmó el local. Y eso que fue en plena mitad de semana. Nuestra vuelta a los escenarios, ahora apostando a tocar en más partes, en este camino que me gusta llamar "la vía hacia la profesionalización", que comenzó precisamente cuando se gestionó lo de la grabación de nuestro primer disco.

En estos momentos, el disco está entrando en la etapa de masterización. Las mezclas están listas y fuimos viendo el avance. Con respecto a todo ese trabajo, puedo decir que Alex Anwandter, el señor productor, es todo un genio! Muchas de las cosas que se vienen en nuestro primer disco están marcadas por un sonido atemporal. Como si hubiese sido grabado en el Big Pink, la casona en Woodstock (las afueras de Nueva York), donde grabó The Band sus primeros 2 discos, o en el estudio donde grababa Neil Young junto a sus compinches de Crazy Horse, todo en vivo. En nuestro caso, al menos, las bases se grabaron a la vieja usanza, en vivo. Guitarra rítmica, bajo y batería tocando al mismo tiempo y todo bien aislado. Lo de mis guitarras fue otro asunto. Me tocó grabar solo, intentando coordinarme de forma precisa con esas bases grabadas. Y, en algunas ocasiones, fue un proceso bastante doloroso. Pero dio sus frutos. Y, dentro de poco tiempo, podrán escucharlo. Estaremos informando, obviamente.

Ya voy en la mitad y veo que estoy dejando de lado el motivo por el cual estoy escribiendo tanta weá hoy. Cuando vi la foto que estoy subiendo ahora, que a su vez subió el wen Simón en el fotolog del grupo, me dieron ganas de subirla acá. Y, de paso, contarles algo de cómo nos fue en esa aventura fuera de Santiago, en el no tan lejano pueblo de Copequén, en el marco de la "Semana Coincana".

¿Qué era esto de la "Semana Coincana"? Una celebración de la localidad de Coinco, a unos 20 kilómetros al poniente de Rancagua (al menos, se sintió que fuésemos hacia el poniente cuando fuimos para allá). Son 5 comunas las que conforman la localidad de Coinco, una de ellas es Copequén, el pueblo de donde viene el padre de Cristóbal Briceño (vocalista de Fother Muckers), el wen Jorge Briceño. Fuimos a dar a la Semana Coincana gracias a su gestión. Y, como era de esperarse, fue en un cartel donde reinaba lo tropical, lo bailable y lo festejable. Sólo festejo con bailongo, un cartel muy poco auspicioso para una banda de rocanrol, más encima nueva, con sólo repertorio propio. Entremedio de todas esas verdaderas “orchestras” de la cumbia, había un cuerpo de baile tropical que había salido en algún matinal. Todo muy freak, en verdad.

Una de las grandes falencias de los eventos en nuestro país, ya sea en la capital como en el pueblo más insospechado que pueda haber, es la del sonido. ¿Por qué mierda siempre tiene que haber ataos con el sonido en todas partes? Como éramos los que abrían la jornada, debíamos ser los últimos en probar sonido. Nos citaron a una hora determinada, y nos dejaron esperando a, prácticamente, la hora de comienzo de todo el cuento. Apenas pudimos conectar nuestros instrumentos, con un chequeo que no duró ni siquiera unos 5 minutos, y nos echaron del escenario para partir.

Al final, nosotros no abrimos, sino que la "orchestra" de casi 8 músicos wenos para la cumbia. Después, las bailarinas ligeras de ropa que tenían su acto montado listo para calentar a una audiencia ya dispuesta para webear de lo lindo. Después de ellas, nosotros. De las 5 canciones que teníamos preparadas para la ocasión, tuvimos que dejar una fuera de la lista, apostando por las 4 fuertes que dejamos. De esa forma, abrimos con Fuerza Y Fortuna, seguimos con tirado Al Sol y, prácticamente sin respiro, con Fueron. Después de la tercera canción, subió el presentador "a echarnos de una", como pensamos. En verdad, subió para obsequiarle a Cristobal, supuesto "oriundo" de Copequén, una polera de Coinco. Terminamos con Héctor (la canción), y yo usando el atril contra la guitarra y dejándola contra el amplificador, acoplando hasta la eternidad.

Los tipos de sonido y el dueño de ese bonito Marshall querían matarme. Pero nada pasó. Sobreviví. Sobrevivimos. Y dimos un wen show de rocanrol. Si quieren saber más, les aprovecho de pasar el aviso: el Sábado 25 de noviembre, en el club MIST (en Av. Suecia), estaremos abriendo para Teleradio Donoso. Más info pronto.

Les dejo un video de la presentación del Clandestino, una canción que no tocamos en Copequén: El Conductor...


Nos vemos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Buena Heckrock!
Tirai más pinta en la foto. A lo más Jimi Hendrix con pelo liso. Jaja...
Que bueno que les esté yendo bien con lo de Fother Muckers. Saludos a todos los del grupo también.

Un abrazo, y gracias por tu post en mi blogson.

SCA

Anónimo dijo...

marcelo hidalgo marchant de la vega se caga a su señora con una trabajadora del fundo copequen