Heroes.

Creo que ya he escrito este pensamiento antes en este cuchitril de los cinco mil caracteres. Y no me incomoda el decirlo de nuevo: actualmente, los gringos hacen mucha mejor televisión de ficción que películas grandes. Y hablo en serio. Al menos, eso me quedó clarísimo tras terminar de ver hoy en la mañana la primera temporada de Heroes.

Lo hice de nuevo: sigo una serie más. Y lo más divertido de todo es que no espero semana a semana por un episodio nuevo. No, señores. Eso es esclavizarse, y uno ya no está pa esos trotes. Prefiero ver varios seguidos, cada cierto tiempo. Gracias a la inagotable fuente de recursos que es Internerd, se puede hacer, y se puede hacer bien. Más que bien. Fue por estos lados que me recomendaron esta nueva serie. Que era un relato bien contado. Que era entretenida. Que era un relato coral. Que esto. Que lo otro. Así que opté por verla. Bajarla, armarme discos de DVD con 4 capítulos cada una (cuando me la recomendaron, Heroes allá en los estados juntos iba por el capítulo 18) y sentarme a ver de a 4 episodios.

Y pasó lo que tenía que pasare nomás: me encantó lo que vi! Justo en una década en que plagan la oferta de películas “mainstream” se ha obsesionado con llevar próceres de los comic a la pantalla grande (y con diversos resultados, por lo demás), la televisión pareciera ser el soporte adecuado para ir desmenuzando los relatos audiovisuales con mayor detalle. Historias épicas que sí pueden ser épicas de a de veras por el simple hecho de que hay más tiempo y espacio para desarrollarlas.

Por el modo en que se presenta, Heroes se plantea como una de esas historias épicas con volúmenes incluidos. De hecho, toda la primera temporada es (más bien, fue… la temporada terminó ayer :p) un Volume One Titulado “Genesis”, donde se dieron a conocer a los actores principales (que son muchos y que no vale la pena enumerar acá, les dejo link wikipedioso para eso: ) y la importante misión de… salvar el mundo. Algo tan trillado y visto como el salvar el mundo se nutre de una complejidad que sólo puede dar el detalle del relato, la dedicación de tiempo y el formato mismo de un relato que se va entregando con periodicidad. No hay apuros en Heroes para ir mostrando tensión y clímax a cada rato, sólo ganas de ir degustando todo esto de a poco.

Noe s de extrañar que su piloto (uno de los mejores que he visto y que, por cierto, saldrá completo en la edición en DVD de la primera temporada, que saldrá a fines de agosto) haya sido mirado con extrañeza por los ejecutivos de la NBC. Le tenían poca fe al proyecto, pero igual le dieron luz verde por falta de propuestas dramáticas para la temporada 2006. De a poco, se fue corriendo la voz de la historia épica de Heroes, hasta que fue fenómeno en todos lados. Incluso casi se cancela a fines del año pasado, por ciertas presiones extrañas del gobierno gringo… pero nada de eso pasó.

Un teaser de su primer episodio...


Heroes nos muestra el cómo estos personajes van descubriendo sus habilidades especiales (o, si quieren llamarlo así, superpoderes :p), cómo van pasando de lo ordinario a lo extraordinario en un lapso breve de tiempo. No solo eso, sino que cada uno de ellos tiene un rol protagónico en lo que va a ser el salvar al mundo. Eventualmente, se conocerán y descubrirán que sus vidas no están relacionadas por el azar. Al menos, con esa premisa parte el relato en el primer episodio. Y, debo decirlo, Heroes cumple lo que promete.

Con una estética de comic, el relato de Heroes se va desarrollando con esa lógica: mostrar las historias paralelamente entrelazadas, sin dejar absolutamente nada al azar y con desarrollo complejo del perfil íntegro de cada uno de estos personajes. A diferencia de la mayoría de las películas de superhéroes que nos llegan de allá, en donde se trata de dar toda la complejización posible en tan solo un par de horas sin ahondar en nada en particular y dejándote con las ganas de ver desarrollo, en Heroes vamos viendo evolución de sus protagonistas. Y ese desarrollo nos permite crear empatía con ellos. Acá nadie es weno o malo, nada es blanco o negro. Nos quedamos con la amplia gama de grises que nos ofrece el maarvilloso mundo de la humanidad, esa de la cual venimos todos y a la cual seguiremos perteneciendo siempre.

Al final del día, es esa complejidad humana la que le va dando credibilidad a una historia, por más elementos de ciencia ficción que presente. Da lo mismo que se desarrollen en Nueva York o en una galaxia lejana, muy lejana. Tenemos que exigirles ese nivel de realismo a estas historias, lo mínimo para irlas siguiendo. El “suspended disbelief” del que tantas veces me he referido (y que sigue siendo una notable teoría, por lo demás ;) ) se aplicaría sólo a las coordenadas de nuestro entorno, no así de nuestra psiquis comos eres humanos. De eso tiene mucho Heroes, y se agradece enormemente.

Ahora sólo queda esperar al edición en DVD con varios extras, el comienzo del Volume Two (que se llama “Generations” y sigue la historia épica de esta gente no solo en nuestro tiempo y espacio) y una cosa que no habíamos visto antes en tele ficción: un spin-off para le verano, de seis episodios, que se llamará Heroes; Origins. Este spin-off mostrará a personajes distintos. La NBC hará votar a la audiencia por estos nuevos personajes, y os ganadores serán incluidos en el segundo volumen de la historia épica. ¿Funcionará? Sólo si las historias que nos cuenten son interesantes y nos logran crear empatía de alguna forma. Por ahora, solo a esperar.