jueves, noviembre 01, 2007

Sobre el goce de tener el primer disco en nuestras manos.


He estado pensando mucho en mi travesía de vida, particularmente en los últimos 10 años, que han visto en mí tantas caídas como aciertos. Hace 10 años, incluso menos, hace unos 3 años, jamás me hubiese imaginado el tener un disco propio en mis manos. El primer disco, el que estamos mostrando en la foto que subo en esta ocasión, con la formación completa: yo, Marto, Pihuelo y Simao.

Tengo 26 años y, según lo que dicta el libro del “deber ser” de alguien que egresó del Instituto Nacional (particularmente, de un cuarto medio matemático), en este minuto debería haber estado titulado y trabajando en alguna empresa, como Ingeniero, haciendo mucha pero mucha plata, cambiándome de casa a un departamento top, comprándome auto del año, pensando en casarme y siendo “emprendedor y digno”. Los dos últimos años como un colegial fueron muy difíciles, y difícilmente puedo guardar un wen recuerdo del colegio. No tengo insignias pegadas en la mochila ni voy a los primeros días de clases a cantar ebrio el himno del colegio. Pero el puto colegio te planta ideas fijas en la cabeza.

Sin embargo (y por suerte), instintivamente, elegí el camino de la realización personal y la felicidad. A punta de tropezones y años perdidos tratando de seguir una carrera que mi “deber ser” me dictaba a seguir, mi vida a los 22 años se estaba volviendo una mierda. Tal como dice la letra de Powderfinger de Neil Young, “tenía 22 años y me preguntaba qué hacer”. Una crisis heavy, que me llevó a tomar la decisión de salirme de la Ingeniería que me carcomía el ser cada día y tomar un nuevo rumbo: periodismo. Partir de cero no es fácil, pero implica automáticamente limpiar el organismo, limpiar el alma y seguir lo que quieres hacer. Eso he estado haciendo desde hace ya cuatro años, con un montón de cambios entre medios. Entre ellos, Fother Muckers.

Es por eso que, al recibir nuestras copias del primer disco en nuestras manos el lunes recién pasado, se me vienen todas estas cosas en la mente. Es muy probable que estuviese escrito en alguna parte. Tenía que llegar a la Facultad de Comunicaciones para conocer al Pihuelo y a Simao y, con el tiempo, hacernos amigos y compartir de música todo el rato. Todo ese deambular de mi vida en esos 5 años después de haber salido del Instituto Nacional (salí en 1998!! :o) era necesario para poder volver a ser joven y poder vivir un adolescencia normal y en calma como nunca la tuve estando en la enseñanza media. Era necesario el ir viviendo y tropezándome para encontrar mi camino.

Y acá estamos: a más de tres años de entrar a periodismo en la UC y a más de dos años desde que nos formamos como Fother Muckers, hoy tenemos nuestro disco en las manos. No Soy Uno ya es una realidad y estará disponible muy pronto en tiendas. Ya empezamos toda la pega de promoción para el disco. Nos escucharán en radios con entrevistas y el primer single Tres Caras Largas, nos leerá en entrevistas en sitios especializados, nos verá en la tele en alguna fracción de segundo… todo eso es lo que conlleva este verdadero hito que es el primer disco. Y sólo queda disfrutarlo y seguir trabajando. Por ejemplo, ayer Pihuelo y Simao estuvieron en el programa Alta Fidelidad, en una hora de entrevista, hablando de lo humano y lo divino. Este viernes estaremos en Nación Rock&Pop también en entrevista y presentando nuestro single. Para hoy debería estar arriba la entrevista para Emol.com. Y así se suma y sigue.

Esto ya tiene un año: una muestra de las sesiones de grabación de No Soy Uno...


Hasta ahora, no me ha afectado la “depresión post-parto”, ese “y ahora, ¿qué?”, como le escuchaba al Pihuelo ayer en la Radio Zero. Aún con la sonrisa en el rostro, sigo disfrutando el hito. Es una de las cosas más importantes que me ha pasado en la vida y la seguiré disfrutando. Si no lo disfrutas, ¿de qué sirve? Quizás este disfrute mío esté obviamente filtrado por todos esos años de “fracasos” y de no obtener “logros”, pero por ahora eso no me preocupa. Sólo hay que gozarla.

Y tocar en vivo. Y mucho. Tocar en cada ocasión que se nos presente. Salir fuera de Santiago a tocar: el viernes pasado tocamos en el Piedra Feliz en Valparaíso, y ha sido un a de las mejores experiencias en vivo que hemos tenido como banda. Estamos cada vez más sólidos en la entrega y embaladísimos como siempre, y con cada vez mayor comunicación. Estamos encontrando nuestra manera de disposición como grupo frente a esas situaciones, y hemos llegado siempre a la misma idea: lo pasamos bien tocando y somos honestos arriba del escenario. Nada más que eso.

Ando prácticamente a mil por hora en la vida. Entre las clases (estoy en cuarto y hay que cumplir pa poder terminar la carrera, obviamente; me queda un año más), el programa de radio (La Bestia Rock, los lunes y viernes a las 11 pm por http://www.radiouc.cl )y las actividades con Fother Muckers (ensayos, reuniones, shows en vivo y demases), mi vida está copada de pega. Pero bajo ninguna circunstancia es pega incómoda y que me den ganas de dejarla, al contrario. Sigo ahí, disfrutando. Y no voy a dejar e disfrutar en ningún momento.

Estén atentos a las novedades. Sigan pasando por el MySpace, el fotoló y, próximamente, el sitio web oficial. Seguimos trabajando gustosos y tocando como Dios manda. Pasándolo bien tocando. Y con el primer hijo bajo el brazo. Un disco es como un hijo, cierto? Al menos la sonrisa en el rostro nos no la saca nadie.